Abbey Road, historia de una compra.

Lo bonito de ir a compar vinilos es que no vas a por algo en concreto, así que no eliges, sino que te elige él a tí. Si reid, reid, pero hay días maravillosos donde uno pasa por casualidad (ejem, ejem, os lo juro...) por la tienda de discos, entras, saludas y te pones a buscar por inercia, uno de Patti Smith, las joyas caras de siempre, Bob Marley, Elvis Costello, el Abbey Road de los Beatles, Tom Wai... ¡¡EL ABBEY ROAD DE LOS BEATLES!! el disco te mira, le das la vuelta y ves una mágica pegatina "18 €", bien, bien, la cosa empieza bien, vamos a ver... sacamos el vinilo ¡¡1969!! Bingo, edición española, lo sacas empiezas la comprobación, señales de uso muy débiles (que se joda Grisom). El disco salta a tu mano y no se separa de tí en media hora que sigues hurgando en la tienda, ¿por qué?, no lo sé, ya tienes lo que querías, es como si hubiese una lucha interior estas deseando salir con el disco pero sientes una fuerza que te dice que puede haber otro que te escoja. El dueño te ofrece otros discos que no te miran con los mismos ojos así que le compras el vinilo y al marcharte con él te dice -Cuídalo... . Ya sabe que lo vas a hacer.

Cuando llegas a casa lo limpias, corres la aguja, y tienes a los beatles metidos en tu habitación. Mas tardes miras en internet y el vinilo cuesta 60€, tu novia te dice que para que lo miras si no lo vas a vender... ¿sentimiento de culpa? no, esta vez no, quizás una reafirmación de que has hecho una buena compra.

Aquí os pongo un breve fragmento de la historia de la portada...

Se dijo que Paul Mc Cartney había muerto y que su foto había sido pegada pues parece más joven que los otros. La imagen representaría un cortejo fúnebre, con Lennon como Pastor, R. Starr como oficial de ceremonias, y George Harrison como sepulturero. Mc Cartney es el único descalzo de los tres. La matrícula del coche aparcado a la izquierda de Harrison es "28 IF", la edad de Mc Cartney si hubiera sobrevivido.

El vinilo no tiene dos caras, tiene 4, Cara A, Cara B, la portada y la historia, que esto es ser un fetichista, un freak, bueno, pero cuando lo he puesto en el tocadiscos he sentido un momento de felicidad instantánea.